Inflación, subidas de tipos de interés y ahora la guerra. Parecen demasiadas cosas para que las digiera el mercado en tan poco tiempo. No es un momento fácil sin duda y el tener tantos frentes abiertos provocará (ya lo está provocando) una volatilidad más alta de lo habitual.
¿Significa que debemos de estar al margen de mercado?
Tomar decisiones drásticas y pasar de 100% de renta variable a 0% o viceversa no suele salir bien, sobre todo si la decisión la tomamos de manera emocional.
Esos pensamientos vienen normalmente cuando no toca. Es habitual querer vender después de caídas porque es ahí cuando sentimos dolor, y cuando la bolsa lleva tiempo subiendo es cuando queremos comprar porque nuestro cuñado se está forrando y no queremos ser menos.
Lo ideal es hacer pequeños ajustes y sobre todo tener una cartera robusta y bien diversificada para evitar que las caídas nos afecten en gran medida.
Los mercados acabarán recuperando pero puede que caigan más todavía antes de hacerlo.
Como la recuperación puede tardar, no es lo mismo atravesar los malos momentos con inversiones a las que le afectan mucho las malas noticias a hacerlo con inversiones más inmunes.
Una cartera compensada es lo que me va a permitir ser paciente y aguantar hasta la recuperación. Si sabemos que vendrán unos días de lluvia no es lo mismo esperar a que escampe en bañador que con chubasquero. En estos momentos en los que nos enfrentamos a subidas de tipos de interés, no es lo mismo estar en acciones tecnológicas que son muy sensibles a este hecho, que en empresas más defensivas.
Capitular y deshacer posiciones en el peor momento dependerá del grado de sufrimiento y este será mayor cuanto mayor sea la pérdida y más tiempo dure. Una cartera robusta y compensada hace que el sufrimiento sea menor y por tanto estemos menos tentados a hacer lo que no toca.
Actualmente quien tiene energía, materias primas y valores con una filosofía más defensiva de ingresos conocidos y no tanto de expectativas de beneficios estará más tranquilo y mejor preparado para lo que nos puede deparar el año.