Durante julio y agosto de 2024, los mercados bursátiles experimentaron movimientos significativos que reflejaron la volatilidad y las incertidumbres económicas actuales. En julio, los mercados cayeron debido a varios factores clave, pero lograron recuperarse en agosto gracias a una combinación de elementos favorables.
Caída en Julio 2024
En julio, los mercados bursátiles globales, incluidos el S&P 500 y el Nasdaq, enfrentaron una corrección significativa. Uno de los principales motivos fue la creciente preocupación sobre el ritmo de las subidas de tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Los datos macro apuntaron hacia la desaceleración y moderación de la inflación, lo que hizo pensar a los inversores que la Fed podría haberse pasado con las subidas de tipos y reaccionaron con ventas.
Además, durante este mes, los resultados financieros de varias empresas tecnológicas no cumplieron con las altas expectativas, lo que aumentó la presión sobre el sector tecnológico, particularmente sobre acciones relacionadas con la inteligencia artificial (IA) que habían sido impulsadas previamente. Por ejemplo, la especulación en torno a los desafíos que enfrentan empresas como NVIDIA, cuya dependencia del auge de la IA está siendo evaluada, también contribuyó a la caída del sector tecnológico.
Recuperación en agosto 2024
En agosto, los mercados comenzaron a recuperarse, impulsados en parte por señales de que la economía de EE.UU. podría estar encaminándose hacia un aterrizaje suave, en lugar de una recesión profunda. Los datos económicos de empleo y la inflación comenzaron a mostrar signos de estabilización, lo que generó optimismo entre los inversionistas.
Otro factor que favoreció la recuperación fue que los inversores comenzaron a especular que la Fed podría estar cerca del inicio de bajadas de tipos, lo que fue interpretado positivamente por los mercados. Además, la continuación de la fuerte demanda en sectores clave, como la tecnología, impulsada por el desarrollo y la integración de la IA en diversos campos, también contribuyó a la recuperación del mercado.
Las subidas de agosto supusieron la recuperación de todo julio y un poco más, haciendo que el balance final del verano fuera positivo. En especial destacan las empresas de pequeña y mediana capitalización que gozan de un descuento importante por no haber subido tanto en los últimos periodos.
Perspectivas a Futuro
Los tipos permanecieron estables en verano, pero se descuentan bajadas para finales de año. Dependiendo de los datos que vayan saliendo sobre inflación y actividad económica las perspectivas pueden cambiar y en función de eso, el mercado se puede mover.
En cualquier caso, nuestra postura es que hay que estar tranquilos con una visión positiva porque es muy probable que las subidas de tipos supongan un aterrizaje suave más que una recesión económica. En cualquier caso, como de eso no está seguro nadie (ni siquiera ellos), si se diera el caso de que los datos empiezan a salir malos y el mercado empieza a corregir, sería una oportunidad de compra más que un momento para asustarse y deshacer porque creemos que la FED y el BCE reaccionarían ante situaciones de estrés ayudando al mercado. Los tipos de interés están en un nivel que permite que haya margen de bajadas y eso nos hace estar tranquilos. Hay quien no opina así porque bajar tipos significaría avivar de nuevo la inflación, pero nosotros creemos que si la FED o el BCE tiene que elegir entre recesión e inflación elegirían esta última.