Para desarrollar la actividad de asesoramiento financiero en España es imprescindible hacerlo a través de una entidad registrada en la CNMV. Por tanto, si quería ejercer de manera independiente tenía que crear mi propia empresa de asesoramiento o bien colaborar con alguna ya existente.
La creación de una empresa tiene unos costes de estructura altos si quieres cumplir con los requisitos de la CNMV y colaborar con alguna de las entidades existentes en España implica tener que ofrecer sus productos, presupuestos comerciales etc, lo que me impedía gozar de la independencia que buscaba.
Es ahí cuando surge Francisco Fernández Gervilla y Gestión de Finanzas EAF (GEF) una empresa de asesoramiento registrada en la CNMV que me permitía cumplir con ambas exigencias, es decir legalidad e independencia.
Es una empresa que presta servicios de asesoramiento en materia de inversión, entendidos como la realización de recomendaciones personalizadas a clientes sobre instrumentos y mercados financieros.
Las EAF son empresas que están reguladas por la Ley del Mercado de Valores, por el RD 217/2008 sobre régimen jurídico de las empresas servicios de inversión y por la Circular 10/2008 de la CNMV, que ofrece información estadística y principales magnitudes de las EAFI.
Como toda Empresa de Servicios de Inversión que opera bajo el paraguas de la Ley del Mercado de Valores, las EAF deben:
La CNMV en defensa del cliente lleva un riguroso control de todas las entidades registradas en él por lo que no es recomendable recibir asesoramiento de personas físicas o jurídicas que no se encuentren debidamente registradas en la CNMV.
La Oficina de Atención al Inversor de la CNMV ofrece una guía de las Empresas de Asesoramiento Financiero, cuyo objetivo es informar al público en general sobre qué son las EAF, qué servicio ofrecen, cómo deben actuar o qué gastos conlleva el servicio de asesoramiento financiero.
En este enlace podrá consultar la inscripción de GEF en la CNMV y aqui la de Ignacio Huerta.
Las EAF realizan una actividad exclusivamente de asesoramiento, lo que significa que no pueden ni intermediar ni depositar dinero del cliente. Estas dos condiciones permiten desarrollar la actividad en un entorno de mayor transparencia en el cobro y procedencia de los ingresos y mayor agilidad y flexibilidad para la transmisión del conocimiento y por tanto, de valor añadido.
El cliente es libre de tener el dinero depositado donde prefiera, contratando los servicios de asesoramiento del EAF para recibir exclusivamente consejo en materia de inversión o productos financieros.
Recuerde:
Si sus finanzas no son muy complejas o el patrimonio del que dispone no es muy elevado, la figura del asesor financiero no es tan relevante. Si la EAF le ahorra al cliente un 1% en gastos o le consigue un 3% extra de rentabilidad y el patrimonio es pequeño, el beneficio de tener un asesor privado no es muy elevado visto en euros. Si además los productos que le interesan al cliente no tienen mucha complejidad, la opinión de un experto no es tan importante al no requerir mucha explicación, ni gestión, ni vigilancia.
Sin embargo:
Contar con un EAF es contar con un traje a medida en lugar de contar con los 3 trajes que vende una tienda a todo el mundo (los que necesita vender). Esta tienda le dirá que está usted muy guapo con uno de esos tres trajes aunque no sea cierto.
Tener un asesor financiero independiente puede ser gratis, todo depende de las necesidades del cliente, de su operativa y la complejidad de su situación. Si su necesidad es algo que no requiere estudio ni gestión podemos orientarle sin cobrarle nada, estaremos encantados de ayudarle y decirle lo que tiene que hacer o dónde dirigirse. Puede hacernos la consulta rellenando el formulario de la página de contacto.
En otras ocasiones las finanzas de un cliente requieren gestión o estudio, pero si conseguimos un ahorro de costes respecto a su situación actual, este puede servir para sufragar nuestros honorarios. Ocurre muchas veces con comisiones de gestión de fondos de inversión, custodia de valores, mantenimientos, corretaje etc.
Además, tenemos acuerdos de colaboración con determinadas entidades para que nos cedan parte del beneficio que les reportan nuestros clientes y ese dinero se lo descontamos al cliente de lo que le cobramos. Es decir, estos acuerdos son para que el cliente pague menos no para ganar nosotros más. Estos acuerdos son siempre con entidades competentes que ofrecen productos interesantes para nuestros clientes por lo que además de obtener un buen servicio, el cliente obtiene un beneficio económico.
No tenemos interés en que los clientes trabajen con las entidades con las que tenemos acuerdo de colaboración puesto que no ganamos más con ellas. Simplemente decimos: “este sitio es bueno para lo que buscas y encima te salen más baratos nuestros honorarios porque parte de tu factura la pagan ellos”. Esto es lo que nos permite mantenernos independientes. Cobramos lo mismo independientemente de donde tenga el dinero el cliente.
Con estos acuerdos de colaboración nuestros honorarios bajan considerablemente.
Como norma general digamos que las EAF cobramos por patrimonio gestionado independientemente de en qué producto esté el dinero o en qué entidad y eso hace que no tengamos sesgos, ni preferencias, ni intereses, ni influencias.
Además GEF tiene un fondo de inversión propio: Eiger Patrmonio Global FI, por el que el cliente no paga asesoramiento, ya que el fondo tiene ya unas comisiones de gestión que nos llevamos y por tanto no procede cobrar doblemente.
Hasta aquí nuestra estructura de costes pero ¿Cómo de caro es NO tener un asesor personal?
No tener una persona de confianza e independiente que le advierta de lo que hacer, de lo que no hacer, o de cómo hacerlo, puede salir muy caro, sobre todo si hablamos de importes altos.
Hemos ahorrado miles de euros a nuestros clientes por transacciones mal hechas por las entidades, en reclamaciones, evitando la contratación de productos supuestamente obligatorios etc. Después de más de 20 años en banca, tengo la experiencia necesaria para saber cómo tratar con las entidades porque estuve en el otro lado y sé cómo funcionan.
Estamos hablando de costes todo el rato pero también está el extra de rentabilidad que puede obtener por invertir de la mano de quien está pendiente del mercado y no de vender tarjetas o alarmas. El estar dedicados en exclusiva al mercado nos permite aprovechar oportunidades que trasladamos al cliente para que tenga un extra de rentabilidad sobre lo que normalmente da el mercado o los productos recomendados. Estas oportunidades no las tendrá normalmente en ninguna entidad financiera. Para más información consulte el apartado de estrategias.
Tipos de asesoramiento:
Ofrecemos la opción de un asesoramiento puntual para aquellos que necesitan un estudio de la situación patrimonial y una propuesta de soluciones. Esto es un coste que se paga una sola vez.
Para aquellos que necesiten además de lo primero una gestión periódica de sus finanzas y servicio de consultoría permanente tenemos el asesoramiento recurrente que se paga trimestralmente.
Conclusión:
Al igual que puede no tener sentido tener un abogado de confianza si no se tienen litigios, ni problemas legales, tampoco tiene sentido tener asesoramiento financiero recurrente si su patrimonio es pequeño o sus finanzas son sencillas. Pero si maneja un cierto capital y no cuenta con un asesor particular, seguramente le está costando dinero.
No confíe en alguien a quien no le influye el resultado de su consejo
Determinamos la cantidad a invertir en cada clase de activo en función del plan.
Planificamos su jubilación en base a sus circunstancias personales.
Analizamos su situación y le proponemos un plan de acción que implanta usted mismo.
Con el asesoramiento recurrente se tiene acceso frecuente y directo con nosotros.
Ofrecemos estrategias de entrada y salida del mercado.
Elaboramos presupuestos domésticos y planificamos el consumo
Si no sabe qué hacer con el dinero, no está contento con la evolución de sus inversiones o simplemente piensa que no está siendo bien atendido, podemos ofrecerle una alternativa.
Reserve su cita y charlemos un rato sin compromiso. Rellene el formulario en la página de contacto, cuéntenos brevemente el motivo de su consulta y díganos su horario de preferencia de contacto.
Para cualquier duda puede contactarme por teléfono dentro de ese horario. Si el asunto es complejo, mejor por email. Sin compromiso ninguno.
Si quiere recibir información sobre actualidad financiera deje su correo electrónico.